Fecha: 17 de Septiembre de 2015
Sarasúa Asociados nos da unas recomendaciones generales
Todas las personas y las empresas contratamos seguros, sean voluntarios u obligatorios, para asegurar nuestros riesgos. Pero ¿sabemos analizar las propuestas que nos hacen las compañías?, ¿tomamos la decisión correcta?.
Sarasúa Asociados, colaborador de APIA, nos asesora en esta materia:
Las recomendaciones generales a la hora de contratar un seguro son:
Ø Acudir a un mediador especializado y competente.
Ø Solicitar amplia información sobre los distintos seguros que existen para el riesgo que usted está interesado en cubrir.
Ø No debe comparar únicamente precios, también hay que comparar las coberturas que cada seguro ofrece.
Ø Compare también las exclusiones de cada uno de los seguros.
Ø Hay que leer detenidamente las cláusulas del contrato antes de firmarlas. Exija una explicación para todas aquellas que no entienda.
Ø En el momento de tomar la decisión, elija el producto más adecuado en función de sus necesidades.
Ø Cuando rellene el cuestionario que le entregue el mediador, recuerde que debe responder con la mayor exactitud, cualquier inexactitud que cometa puede provocar problemas posteriores a la hora de cobrar la indemnización.
Ø Usted habrá formalizado su contrato de seguro con una compañía, cuando haya firmado la póliza. Antes de firmarla habrá rellenado una solicitud, a usted la solicitud no le obliga a nada. Sin embargo, la proposición de seguro que realice la compañía, como consecuencia de esta solicitud, tiene que ser mantenida durante 15 días.
Ø Toda póliza debe contener unas Condiciones Generales (comunes para todas las pólizas) y unas Condiciones Particulares (individualizan cada contrato).
Ø Las exclusiones de Coberturas tienen que aparecer en la póliza en negrita o de alguna forma que las haga destacar. La famosa letra pequeña del contrato está prohibida por la Ley del Contrato de Seguro, cualquier cláusula limitativa que aparezca con este formato de letra queda inmediatamente anulada.
Ø En el momento de decidir la suma asegurada (indemnización máxima que se cobra en caso de que suceda el siniestro), en los seguros de daños, es muy importante que coincida con el valor real del objeto que se va a asegurar coincida con la suma asegurada.
Ø Evite el sobreseguro (cuando el valor real del objeto asegurado es inferior a la suma asegurada), lo único que conseguirá será pagar una prima más elevada, pero en caso de siniestro no cobrará más dinero que el valor real del objeto asegurado. No tiene sentido asegurar la casa por valor de 20 millones de pesetas cuando su verdadero valor es de 15 millones. La aseguradora nunca pagará más de 15 millones en caso de siniestro.